En diciembre de 2021, Colombia inauguró su segundo parque eólico en el departamento de La Guajira (Guajira1) compuesto por 10 aerogeneradores con potencial de producción de 20 megavatios de energía y una inversión aproximada de US$18 millones. Este proyecto – liderado por Isagén e implementado por la compañía española Elecnor – es el primero de 16 parques planeados en total, que permitirán la entrada de Colombia en el listado de los primeros 20 países con producción significativa de energía eólica en el mundo (China, Estados Unidos, Alemania e India tienen el 72% de la capacidad de producción mundial de energía eólica, mientras que Dinamarca es el país del mundo con mayor participación de energía eólica entre todas las fuentes de producción energética que tiene dicho país).
Para entender el impacto de este proyecto, es importante resaltar lo siguiente:
a) La energía eólica es renovable y no contaminante.
b) Guajira1 permitirá reducir 136 toneladas de CO2 a la atmósfera y generar 20 megavatios de energía, que equivalen al consumo energético de 33.295 familias colombianas.
c) En el mundo, las soluciones de energía eólica representan un poco menos del 10% de la producción total energética, mas su participación está aumentando a una tasa sin precedentes.
d) Los precios de la energía eólica son muy estables en comparación con otros tipos de energía, debido a los mínimos costos de mantenimiento y combustible en que se incurren, posterior a la inversión inicial.
e) Dichos costos se están reduciendo de forma permanente por los avances en los diseños y las tecnologías de los aerogeneradores, haciendo esta fuente emergente cada día más atractiva y competitiva.
Para que todo esto se de, es necesario implementar una red local entre los aerogeneradores, el centro de control y la subestación (elemento que canaliza la energía producida). Esa red debe contar con características únicas, como:
1) Evitar la disrupción del sistema eólico.
2) Permitir cubrir grandes distancias.
3) Soportar inducciones potenciales.
4) Asegurar alta resistencia mecánica, hídrica y climática.
5) Contar con amplia vida útil para una operación estable de 25 años.
Esta red es crucial para la administración y control del parque y permite regular la productividad del mismo.
Microlink (empresa dedicada a la conectividad en América Latina y basada en Bogotá) fue la escogida para apoyar en el diseño y la implementación de esta red de fibra óptica, la cual habilitará la operación inteligente de este parque y apalancará la costo-eficiencia del mismo.
Con soluciones de esta naturaleza, Colombia demuestra que puede estar a la vanguardia para la implementación de proyectos transformacionales en la generación responsable de energías, cuando los riesgos ambientales emergen como aquellos con mayor prioridad de ser gestionados y con mayor impacto adverso en la estabilidad y sostenibilidad de la humanidad a largo plazo.
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Mark
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